2014 TE ODIO Y TE AMO
Un año no se determina si fue exitoso o no solo por
los factores que hay alrededor, por las metas y sueños cumplidos, los nuevos
trabajos o amores a nuestro lado. Un año es exitoso por el simple hecho de a
haber sido capaces de atravesar cualquier cosa que se nos presentara. Por haber
reído lo suficiente o llorado hasta el cansancio. Por haber caído y haberse
levantado o quizá por seguir intentándolo.
Para los nuevos comienzos ni las nuevas metas se debe
esperar un día del año. Cada día ya es un regalo. Cada día es un año viejo.
Hay muchas maneras de terminar el año y de
comenzarlo. Hoy muchos pueden estar con su familia, otros de paseo, trabajando,
quizá durmiendo o como yo tomando té al frente de la chimenea y escribiendo. Como
cerremos el año no determina la manera como lo comencemos. Algunos terminan el
año con broche de oro, otros pueden estar pasando por los momentos más difíciles
de sus vida , otros quizá tambaleando ….No importa lo que sea, lo que hace que un
año nuevo se empiece con pie derecho son las ganas. Es un año más para
reconocer de qué estamos hechos. Para honrar lo que somos, para confiar en lo
que creemos.
Hoy podría decir que termino el año sin pies ni
cabeza, y sin piso para caminar. Pero todo lo contrario, creo que esta es la mejor manera de empezar el año porque me
exige sacar todo lo que tengo en el fondo, toda la fe,
toda la fuerza, valor y convicción. Me exige recordar cada minuto lo que Dios
me ha dado. Mis valores, capacidades, mis sueños y deseos. Me permite recordar
que no hay malos tiempos, sino malas caras. Y que todo depende del cristal con
que lo mires. No solo para mí sino para
todos, les deseo que su mayor propósito para este año sea siempre recordar que
todo lo bueno esta dentro de ustedes. Fe, convicción y acción. Y lo más importante es que la vida siempre
tiene cosas lindas para nosotros. Ojos y brazos bien abiertos para recibir. Los
milagros siempre están ahí, solo es cuestión de reconocerlos.
Bye bye 2014. Has sido espantoso, feo, hermoso,
maravilloso y desgarrador. Me has abierto el corazón a la luz y a la oscuridad,
al dolor y al perdón has sido terrible y
milagroso. Lleno de aventura, llanto, crecimiento y amor. Has sido absolutamente difícil
y encantador al mismo tiempo. Te odio y te amo. Estoy totalmente agradecida…
pero suficiente!! 2015 tráeme paz, la alegría y la normalidad…normalidad? Mmm no
conozco mucho esa palabra. Equilibrio ¿qué tal?
Regálame más atardeceres, besos y risas y amor. En realidad
solo quiero a Dios en mi corazón. Lo demás viene por añadidura.
|